Nuevo podio mundialista de las suecas, que logran repetir posición en un mundial tras las medallas de bronce obtenidas en 1991, 2011 y 2019.
El conjunto de Gerhardsson le ganó la partida a su compatriota Gustavsson. Una amarga derrota por dos goles a cero que, sin embargo, se celebra como una gran victoria para las Matildas en un mundial en el que se ha reivindicado como una gran potencia mundial.
Abrieron las suecas el marcador con un gol de penalti de Fridolina Rolfö en la marca de la media hora. Las australianas hicieron honor a su lema de “nunca dicen muerto” y lucharon por meterse de nuevo en el partido, pero la suerte ingrata volvió a ponerse del lado escandinavo y Kosovare Asllani se convertía de nuevo en heroína para las suecas, sentenciando el encuentro a casi 20 minutos del final.
La del AC Milan pasa a la historia como la primera jugadora en anotar en el partido por el tercer puesto de un mundial (masculino o femenino) en dos campeonatos consecutivos. Suecia se llevaba el bronce en la edición de 2019 al imponerse 1-2 contra Inglaterra. Asllani era en esta ocasión la que abría el marcador, anotando Sofia Jakobsson el segundo tanto. Fran Kirby recortaba distancias para Inglaterra, pero el metal se lo llevaban finalmente las suecas.
SUECIA 2 – AUSTRALIA 0
Once de gala para el conjunto sueco, las mismas jugadoras que perdieron con España en la semifinal del pasado martes. Gerhardsson confiaba en su 4-5-1 habitual de este torneo, poniendo todo el peso de su ataque en las laterales y Blackstenius.
Gustavsson repetía la formación de la pasada semifinal contra Inglaterra, sin variar su 4-4-2, con Kerr completamente recuperada y la ausencia de Kennedy por lesión. La defensora ya había sido baja en el partido anterior y han confirmado que presenta síntomas de conmoción cerebral tras el encuentro contra Francia.
En un estadio de Brisbane con entradas agotadas, el combinado nacional sueco se hacía de nuevo con el tercer puesto venciendo por 2-0 a las Matildas.
Suecia reservó su mejor fútbol para este encuentro
Pese a la máxima igualdad sobre el papel, Suecia comenzó llevando la voz cantante, manteniendo la mayor parte de la posesión en la primera mitad. Macca Arnold entró en acción en el primer minuto de juego y no estuvo exenta de participación durante todo el partido.
Al igual que contra Japón, las suecas creaban más, en uno de los partidos que más cómodas se las vio con el balón.
Las mejores ocasiones de las Matildas llegaron en los contraataques. Sam Kerr, en particular, fue una amenaza constante en cuanto las suecas jugaban el balón próximas a su defensa. La delantera del Chelsea estaba atenta al fallo de las contrarias para recuperar balones y, tanto ella como Hayley Raso, crearon las mejores oportunidades de Australia en esta primera mitad, obligando a Zećira Mušović a parar en varias ocasiones.
La guardameta sueca del Chelsea, tras varios encuentros en los que fue más protagonista que el resto de sus compañeras, se está ganando a pulso el ser una de las máximas contendientes a llevarse el Guante de Oro en esta edición del mundial.
Penalti muy justo y Rolfö no fallaba
A medida que pasaban los minutos, las tornas se igualaban, poniendo ambos contrincantes mucho de su parte para llevarse el juego a su lado. Sin embargo, fueron las nórdicas quienes golpearon primero.
La galesa Cheryl Foster era llamada desde la sala de videoarbitraje para revisar un posible penal en el área de Australia. Finalmente, la colegiada consideró que Clare Hunt había derribado a Stina Blackstenius en el área y decretaba la pena máxima. Tras un intento de tratar de confundiar a guardameta australiana acerca de quién sería la encargada de lanzarlo, finalmente era Fridolina Rolfö la que convertía desde los once metros.
Tras encajar el gol, las Matildas tuvieron sus mejores minutos en esta primera parte, pero no pudieron crear nada claro. Suecia logró recuperarse de la presión local y tuvo la mejor de las oportunidades de estos primeros 45 minutos, pero Stina Blackstenius no logró convertir y las Matildas se fueron al descanso con solo un gol de desventaja.
Asllani sentenciaba en el 67
Volvimos de vestuarios con un encuentro de lo más igualado, pero no pasó mucho tiempo en la segunda mitad para que Suecia siguiera afirmando su dominio y finalmente terminaron por duplicar su ventaja.
Asllani remató desde la frontal del área tras una buena labor de Blackstenius, que le puso el balón en bandeja a su capitana.
Las Matildas tuvieron la oportunidad de recortar la ventaja tras un tiro libre. Hunt logró ganar el cabezazo y ponerlo en el camino de su compañera de defensa central, Clare Polkinghorne, pero su remate fue directo a Mušović, quien pudo detener sin demasiadas complicaciones.
Seagotaba el tiempo y Australia no pudo convertir sus últimas oportunidades. Suecia fue merecidamente la ganadora de esta final de consolación del mundial de 2023.
A pesar de la derrota, las Matildas pueden irse con la cabeza bien alta, después de inspirar a una nación entera y asegurar el mejor resultado de su historia en la Copa Mundial Femenina de la FIFA. La Matildamanía ha llegado para quedarse.
FICHA DEL PARTIDO
Suecia: Mušović (P), Andersson, Eriksson, Ilestedt, Björn, Angeldal, Rubensson, Rolfö, Asllani (C) (Hurtig, min. 67), Kaneryd (Sembrant, min. 89) y Blackstenius (Blomqvist, min. 67).
Entrenador: Peter Gerhardsson.
Australia: Arnold (P), Catley, Polkinghorne (Chidiac, min. 74), Hunt, Carpenter (Nevin, min. 74), Foord, Cooney-Cross, Gorry (Van Egmond, min. 60), Raso (Vine, min. 60), Fowler y Kerr (C).
Entrenador: Tony Gustavsson.
Goles: 1-0 Rolfö (min. 30) y 2-0 Asllani (min. 62).
Árbitra: Cheryl Foster.
Partido disputado en Brisbane Stadium (Brisbane, Australia).
Asistencia: 49.461 personas.
Incidencias: Tarjeta amarilla a Gorry (Australia, min. 45+1), tarjeta amarilla a Rubensson (Suecia, min. 89) y tarjeta amarilla a Hurtig (Suecia, min. 90+4).
Premio “Player of the Match”: Fridolina Rolfö.
Autora: Marga Martin
Fotografía: FIFA Women’s World Cup